Entre el olor a humedad y el olor a lavandina del trapo en el baño me costó conciliar el sueño -y eso que veñía de 7 horas de profundo aburrimiento en el tren a Rosario-.
La hotelería en Rosario es bastante cara, por lo que el Hotel Estación Callao es tremendamente caro para lo malo que es. Evítenlo a toda costa. El taxi en la ciudad es barato, así que si llegan a la estación Rosario Norte como yo no se engañen por la cercanía y vayan a un apart hotel o una habitación privada en un hostel por la misma plata.
Lo único bueno es que PARECE que no se usa como hotel alojamiento, así que no hay movimiento de parejas en busca de refugio ocasional. Pero no puedo jugarme 100% porque yo estuve una noche de miércoles y eso puede cambiar mucho durante el fin de semana…
Leave a Reply